Antes de comprar un departamento, evalúa la conveniencia de adquirir una propiedad nueva o usada, tomando en cuenta sus pros y contras
Cuando tomas la decisión de comprar un departamento, con la finalidad de tener tu primera propiedad o cambiar de vivienda, siempre surgen preguntas y dudas que debes aclarar.
Una de las dudas más frecuentes es si adquirir uno nuevo o usado.
¿Qué hacer frente a ese dilema?
Lo pertinente es indagar sobre las ventajas que tiene cada uno, para que al final tomes la decisión que más se ajuste a tus necesidades.
¿Nuevo o usado?
Te ayudamos a entender los beneficios de cada uno, para ayudarte a escoger la mejor opción.
Pros y contras de una propiedad nueva
Revisemos en primer lugar las ventajas y desventajas de comprar un departamento nuevo.
Pros:
- Puedes pagar el pie en cuotas si eliges proyectos que están en blanco o verde.
- Beneficios tributarios en el pago de contribuciones, por ejemplo, cuando la vivienda entra en DFL2.
- Permite acceder a garantías legales en caso de daños a infraestructura, fallas de instalaciones o terminaciones.
- Estrenarás cada uno de los espacios.
- Es menos complicado personalizar el departamento de acuerdo con tus gustos.
- Las instalaciones eléctricas e hidráulicas son nuevas y eso garantiza tiempo de uso sin fallas.
- Cuentan con mayor seguridad.
- Mayores áreas de esparcimiento y vida en comunidad.
- Puedes elegir piso y orientación.
Contras:
- Los precios son mayores que las propiedades usadas, sobre todo si se ubica en comunas de mayor valor.
- Las ubicaciones a veces no son las mejores, porque se desarrollan en áreas más lejanas de la ciudad.
- Tienen menos espacio que las propiedades más antiguas.
- Que el resultado del departamento construido difiera del render de venta.
- La fecha de entrega puede extenderse por contratiempos en la ejecución de la obra.
Pros y contras de una propiedad usada
Ahora procedamos a mencionar lo bueno y lo malo de una vivienda antigua.
Pros:
- Ahorros importantes porque las propiedades usadas tienden a tener precios menores.
- No se paga IVA en la compra, siempre y cuando no entre en la categoría de “vendedores habituales”.
- Rentabilidad inmediata si la transacción es para inversión, ya que se puede arrendar con mayor rapidez.
- Si adquieres una propiedad amoblada, tendrás menos gastos a la hora de equiparlo.
- Suelen ser más espaciosos que los departamentos nuevos.
- Tienen mejor ubicación que los proyectos más recientes.
- Entrega inmediata.
Contras:
- Las viviendas usadas en la mayoría de las ocasiones necesitan arreglos para corregir problemas, adecuar espacios y hasta cambios de materiales.
- No aplica para beneficios tributarios en el pago de contribuciones.
- Mantenimiento más frecuente de acuerdo con la cantidad de años que tenga de construido.
- Pocas o ninguna área de entretenimiento como piscina y parque.
- Verificación legal antes de firmar la compra.
- Podría perder valor si hay inestabilidad en el mercado inmobiliario.
Sea cuál sea tu decisión, lo prudente es recurrir a la asesoría de una inmobiliaria de confianza, para que puedas garantizar tu inversión.
En FAI tenemos los proyectos y los especialistas para satisfacer tus dudas y aspiraciones.